Un incendio es un suceso o siniestro que se puede producirse de diferentes formas.

Investigar la causa de un incendio requiere en primer lugar localizar correctamente el Origen, en segundo lugar el Foco y el tercer lugar la Fuente de Ignición.

No hay que confundir una combustión elevada en una zona con el origen de un incendio dado que la carga térmica expuesta a la combustión es un factor importante a valorar a la hora de una investigación correcta.

La investigación de un incendio requiere conocimiento de diferentes ciencias y materias dado que el fuego afecta diferentes elementos y materiales de forma diferente, y la evolución del mismo requiere una interpretación correcta del protagonismo de cada elemento o material afectado. A su vez valorar oxigenación o respiración del incendio es importante a la hora de interpretar la evolución del mismo.

Un desescombro selectivo puede manifestar al investigador que elementos se desprendieron primero y que elementos posteriormente por lo que la interpretación de las capas de escombros es otro factor importante ante una destrucción por incendio.

En los vehículos la investigación de causas se complica aún más debido a que nos encontramos un gran número de diversos materiales con diferentes características y resistencia a la combustión acumulados en un pequeño espacio.

Un investigador de incendios debe tener conocimientos del comportamiento de materiales, ciencia de los materiales, electricidad, mecánica, química, física, metalografía… dado que una interpretación deficiente de la escena puede cambiar de forma contundente.

Una investigación correcta y una estrategia pericial adecuada garantizan la mejor defensa del cliente ante una responsabilidad que puede suponer una importante indemnización o pérdida económica.